Posiblemente podríamos estar todos de acuerdo en que la famosa sentencia de Peter Drucker; “lo que se mide es gestionable” puede tener su antítesis con “lo que no se mide es ingestionable”. Precisamente por eso, además de identificar los factores comunes observados en muchas organizaciones que se han transformado con éxito (“The numbers behind successful transformations”. Article October 2019 on McKinsey Blog by Kevin Laczkowski, Tao Tan and Matthias Winter), queremos ponderar o añadir la importancia del factor medir las “soft skills” para mantener dichas transformaciones exitosas de forma sostenible.
El citado artículo de McKinsey pondera y cuantifica estadísticamente los resultados de muchas empresas, que lleva a establecer cuatro aspectos comunes en todas las Organizaciones que han culminado Cambios o Transformaciones con éxito, a saber;
1.La necesidad de pensar en grande y abarcando toda la Organización: aunque muchas empresas empiecen un cambio cultural pensando sólo en unidades de negocio o departamentos clave, la realidad estadística indica que, sólo aquellas que piensan transversalmente, interdepartamentalmente y globalmente, son las que consiguen Transformaciones exitosas.
2.Hay que moverse rápido y renovar continuamente; esto es así, porque también hay datos estadísticos que muestran que el mayor % de cambios y mejoras se consiguen en un 75% en los 3 primeros meses del proyecto de cambio, el 58% en los 6 segundos meses y solo se consigue un 28% en los últimos 3 meses de proyecto. Ello indica que es necesario re-definir continuamente proyectos de cambio, para conseguir el mayor volumen de mejoras y aportaciones, de forma continua.
3.Prioricemos la salud organizativa: aquellas compañías que consideran las mejoras sociales y que le dan a los aspectos sociales prioridad o mayor importancia, dentro de sus procesos de cambio, suelen obtener mejores resultados que aquellas organizaciones que no se lo dan o no los consideran prioritarios.
4.Ampliemos nuestras aspiraciones: aquellas Compañías que amplían sus expectativas y objetivos, a medida que van avanzando en la consecución de resultados, se diferencian de aquellas que no los amplían, en que consiguen, finalmente, mejores resultados. En definitiva, ello es así porque aprovechan y gestionan mejor, sus niveles de expectativas.
Vemos como estas cuatro afirmaciones establecidas por McKinsey, que compartimos en su totalidad, fácilmente pueden complementarse con nuestra aportación de que la medición de las “soft skills”, de las personas que conforman la organización, están en línea con las mismas y permiten asegurar más y mejor el éxito y la sostenibilidad continua del cambio y transformación de la Compañía.